March Madness.

Lo único que disfruto más que la NBA es el basket colegial. Es lo mismo sólo que mejor. ¿Por qué? Porque aquí lo único que importa es ganar. No hay un mañana por el cual cuidar ese dedito meñique que te duele. No hay preocupación por quedar bien con los patrocinadores. No importa ir vestido increíble para la conferencia de prensa y ser seleccionado para el All Star, el buscar una nueva coreografía para cuando anuncien la alineación titular es absolutamente irrelevante. Aquí se matan por ganar, todos los juegos dejan absolutamente todo en la cancha. Y lo que es increíble es como los favoritos van perdiendo uno por uno porque universidades totalmente desconocidas traen más ganas que ellos.

Marzo es la época de locura absoluta en el basketball colegial, el "March Madness", el Big Dance. 64 equipos listos para asesinarse con tal de llegar al Final Four. Aprovecho para comentar que me encanta que las etapas tengan nombres. No sólo son octavos de final, cuartos, semis, etc. No, después de la segunda ronda sigue el Sweet Sixteen, luego el Elite Eight para finalmente llegar al Final Four y a la final. Los equipos se dividen en 4 regiones, juegan por su lado y los mejores se enfentran en el Final Four que este año se jugó en Indianapolis.

La locura para los jugadores empieza desde ese primer juego, pero para nosotros los fans un poco antes con los brackets. Este año, que no gané y voy a presumir que el año pasado sí quedé en primer lugar de mi grupo, mi bracket quedó así. Pido disculpas por la división pero no pude sacarle la foto completo:

Región Este

Región Midwest

Región Sur

Región Oeste

Final Four

Como se pueden dar cuenta no iba tan mal hasta los upsets de Kansas y Syracuse. Y repito, eso es lo que hace a este torneo algo increíble. En la NBA solamente ha ocurrido 3 veces que el número 8 bote al número 1 en los Playoffs. Aquí no, aquí pasa todos los años. De los 4 rankeados como #1 solamente Duke llegó al Final Four. Un torneo de juegos increíbles con unos buzzer beaters grandiosos. Los mejores momentos que vi fueron la daga al corazón de Kansas por parte de Ali Farokhmanesh aniquilando por completo la esperanza del número 1 de la nación (el video está más abajo, es un must see aunque se encargó de joderme todo el bracket). El juego entre Xavier y Kansas State que se fue a doble tiempo extra, uf. El tiro ganador de Michigan St. contra Maryland y el de Murray State para ser el primer upset del torneo versus Vanderbilt. Villanova se fue temprano, así como Georgetown y Wake Forest. Y por supuesto, la mayor sorpresa para todos: Butler enfrentándose a Duke por el campeonato.

El #5 Butler contra el único #1 sobreviviente se enfrentaron en lo que todos pensabamos iba a ser una masacre y se convirtió en una de las mejores finales de la historia. La ventaja cambió bandos más de 15 veces y estuvieron empatados 7 veces. Un jue-ga-zo. Al final Butler tuvo la oportunidad de empatar y ganar de la mano de su estrella Gordon Hayward. Tuvo un doble para empatar que falló. Zoubek de Duke fue a la línea de tiros libres, metió el primero y falló el segundo. Ahí, con 3 segundos restantes, Hayward lanzó una plegaria desde la media cancha que le chupó el aire a todo el edificio y le sacó una lagrimita a todo fan de Duke alrededor del mundo porque estuvo a nada de entrar pero no lo hizo. Dándole a Duke su 4o. campeonato en la historia y logrando que Coach K empate con el legendario coach de Kentucky Adolph Rupp para el segundo lugar. El primero lo tiene UCLA con 11 campeonatos. El premio al Most Outstanding Player fue para Kyle Singler.

Les dejo los últimos momentos de la final y obviamente el tiro de Northern Iowa.

Chequen lo que faltaba de juego. Hielo en las venas.

A ustedes los emociona marzo por el puente del 21 y porque deja de hacer frío. A mí por el bracket. Amo este torneo.